HUMILLACIÓN

El Athletic Club deja completamente noqueada a la Real Sociedad en San Mamés con un contundente 4-0.

Los locales marcan la mayor victoria en un derbi tras más de 50 años en un partido muy intenso en el que el acierto repentino ha servido para decantar un partido con pocas ocasiones para ambos lados. El conjunto de Marcelino marcó un ritmo muy alto que obligó a los gipuzkoanos a prácticamente jugar en su campo, pero la gran labor defensiva de los centrales impidió a los arietes zurigorris conseguir ocasiones claras, hasta el penalti señalado por el VAR tras una mano de David Silva que terminaría en una excelente atajada de Álex Remiro para mantener las tablas.

Con esto nos iríamos a los vestuarios viendo un partido típico de 0-0, y así comenzaría la segunda mitad, en la que la intensidad y el juego defensivo marcarían un partido que Vivian cambió de rumbo con un excelente remate con la testa que abriría la lata, seguido de un remate de Sancet en un córner botado desde la otra esquina que haría el segundo para los de Marcelino. 

Esto dejaría encarrilada un partido que ya se vestía de histórico en Bilbao, y, pese a un par de internadas visitantes sin éxito, el Athletic conseguiría de la mano de Williams y del capitán Muniain un póker histórico que deja la clasificación apretada y a los donostiarras con el dolor de haber vivido una de sus peores noches de derbi.

📝 | Imanol Rey

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